El cuidado
“Puede, por así decirlo, quitarle al otro el ‘cuidado’ y en el ocuparse tomar su lugar reemplazándolo… El otro es arrojado de su sitio; …para desentenderse por completo de ello… En este tipo de solicitud, el otro puede hacerse dependiente y dominado, aún cuando este dominio sea tácito y le quede oculto a él mismo”.
Martin Heidegger